La economía o consumo colaborativo ha llegado a nuestra sociedad para quedarse, al principio podía parecer una simple moda pasajera pero actualmente, con el cambio de mentalidad que se está produciendo en los consumidores, se hace muy relevante un cambio en la forma que tenemos que comportarnos con el planeta y ahí es dónde este tipo de consumo arraiga con tremenda fuerza.
En este panal sobre la economía colaborativa, podemos observar los principales sectores que se han visto afectados por la irrupción del consumo colaborativo, y las empresas más significativas en cada uno de ellos(Ebay, Sharedesk, Side-car, Eatwith…).
La economía colaborativa está teniendo un enorme auge debido al contexto de crisis económica en la que actualmente seguimos inmersos, porque aunque el bien común y el altruismo sean unos conceptos grandilocuentes, en otro tipo de contexto desgraciadamente este tipo de economía no se habría desarrollado con tanta determinación y de forma tan intensa.
¿Marketing vs economía colaborativa?
Otro de los aspectos que puedo destacar del consumo colaborativo es que aunque puede parecer que el consumo colaborativo está en contra del marketing, ya que propicia que los consumidores adquieran menos productos. Esta visión sería demasiado simplista, porque hay que tener en cuenta que también este tipo de economía genera importantes sinergias entre las personas que la utilizan y facilita el consumo a personas que con rentas bajas igual no pueden adquirir un producto pero adquiriéndolo colaborativamente igual sí pueden realizar ese gasto.
Los medios de comunicación se han hecho eco de este nuevo tipo de consumo pero sobre todo en las noticias con los casos de Uber y Blablacar, pero a parte de estas mediáticas empresas, podemos encontrar una tipología enorme, por ejemplo, de alojamiento de viajeros, trueque de comida, crowfunding, compras colectivas, huertos urbanos compartidos, bancos del tiempo, artesanía, música colaborativa, educación…
Parte del auge de la economía colaborativa se debe a la existencia de prosumidores, esos consumidores activos que tratan de estar informados y buscar nuevas herramientas para solucionar sus problemas, de este concepto ya os he hablado en mi anterior entrada.
La economía colaborativa se ha centrado en las 5 palancas de crecimiento exponencial, según recoge @pentagrowth.
- Conexión: como han hecho Spotify o Tinder conectando a usuarios que ya se conocen mediante la música o permitiendo que conozcas a gente que tiene una localización cercana.
- Agregar: AirBnb ha sabido unificar en una sola web la posibilidad de alquilar una habitación o apartamento en la ciudad que quieras a un precio económico.
- Empoderar: Kickstarter, la mayor plataforma del mundo para conseguir microfinanciación para iniciar cualquier tipo de proyecto, un magnífico ejemplo de lo que la economía colaborativa puede lograr con el esfuerzo de los individuos.
- Instrumentar a los socios: Apple es el paradigma de este punto, dando a los clientes la posibilidad de elegir las canciones que querrían descargarse de su tienda iTunes por un precio bastante económico y cambiando el mercado de la música.
- Compartir conocimiento: el mejor ejemplo es Wikipedia, la enciclopedia colaborativa por excelencia, que genera abundancia y logra eficiencia, pero uno de los aspectos más difíciles de contestar es ¿cómo valorar esta plataforma?.
También
se centran en tratar de explicar el nivel de aceleración para aceptar estas aplicaciones, y por ello proponen esta fórmula: conectividad en los usuarios*plataforma utilizada.
Concluyendo, la economía colaborativa no ha hecho más que dar sus primeros pasos en España, todavía falta que se generalice, esperemos que las autoridades legislativas permitan que siga creciendo y no impongan sanciones o prohibiciones a estas empresas que en la mayoría de casos sólo quieren empoderar al consumidor final.
Felicidades a la página web www.consumocolaborativo.com por la gran cantidad y calidad de la información que ofrecen.
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